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A falta de tres partidos por disputar, el Real Madrid está en riesgo de cerrar la temporada 2024/25 sin títulos, en la primera campaña de Kylian Mbappé como jugador merengue. La gran figura del equipo ha brillado a nivel individual, pero los objetivos colectivos siguen sin cumplirse.

El delantero francés, que llegó el verano pasado tras años de intentos por parte del club blanco, marcó un hat-trick este domingo en el Clásico ante Barcelona, alcanzando los 27 goles en LaLiga y tomando ventaja de dos sobre Robert Lewandowski en la carrera por el Pichichi.

Con ese triplete, Mbappé también llegó a 39 goles en todas las competiciones, estableciendo un nuevo récord como el debutante más goleador en la historia del club, superando las 37 dianas de Iván Zamorano. Lo hizo en apenas 53 partidos, dejando atrás nombres históricos como Hugo Sánchez, Ronaldo, Van Nistelrooy y Cristiano Ronaldo en sus primeros años con el equipo.

Sin embargo, los números de Mbappé contrastan con una temporada decepcionante para el Real Madrid: eliminado por el Arsenal en Cuartos de Final de Champions League —torneo que el PSG, su exequipo, podría ganar—, y superado por el Barça en Supercopa, Copa del Rey y ahora también en Liga.

Aunque el francés aún puede ampliar su marca goleadora en los tres partidos restantes, su arribo a la Casa Blanca, de momento, no ha cambiado el panorama colectivo. La frustración es evidente para un Real Madrid que fichó a Mbappé para conquistar Europa, pero que por ahora está más cerca del vacío que de la gloria.