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El Real Madrid superó al Celta de Vigo por 3-2 en un partido con dos caras muy distintas, y se mantiene a cuatro puntos del FC Barcelona que sigue líder en LaLiga. El encuentro, disputado a las 14:00 horas locales, sirvió como antesala perfecta a El Clásico del próximo domingo, que podría definir el rumbo final del campeonato.

El equipo de Carlo Ancelotti dominó por completo la primera mitad, con una actuación estelar de Kylian Mbappé, quien marcó dos goles y alcanzó los 36 en la temporada. El francés está a solo uno del récord de Iván Zamorano como el debutante más goleador en la historia del club blanco.

Sin embargo, tras el descanso, el Real Madrid perdió el control del juego. Celta aprovechó el bajón físico y mental del rival y logró descontar en dos ocasiones, quedando a un solo tanto del empate en un final cargado de tensión para los locales.

La desconcentración del conjunto merengue fue tal que terminó jugando con varios canteranos, entre ellos Jacobo, y sin defensores naturales sobre el campo. El susto no pasó a mayores, pero dejó claro que el equipo aún tiene puntos débiles que corregir antes de enfrentar al Barça.

Con esta victoria, el Real Madrid llega con confianza al duelo más importante del calendario. El Clásico en el Santiago Bernabéu será crucial para las aspiraciones de ambos equipos en la recta final de LaLiga.