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El Barcelona logró un trabajado triunfo este sábado en su visita al Leganés, imponiéndose 1-0 gracias a un autogol de Jorge Sáenz al inicio del segundo tiempo. En un duelo marcado por la intensidad y la resistencia del conjunto local, los dirigidos por Hansi Flick supieron aprovechar un error rival para sumar tres puntos vitales en su lucha por el título en LaLiga.

Pese a tener en el horizonte el partido de vuelta de cuartos de final de Champions League ante el Borussia Dortmund, el Barça no reservó a gran parte de sus titulares, con solo dos modificaciones en el once inicial: Ronald Araujo y Eric García ocuparon los lugares de Pau Cubarsí y Frenkie de Jong. El planteamiento ofensivo se notó desde el arranque, con dominio en la posesión y presencia en campo rival.

Leganés, sin embargo, volvió a mostrarse como un rival incómodo ante los grandes. Dani Raba fue el motor del equipo local, generando peligro constante desde la banda izquierda. La ocasión más clara llegó con un centro suyo que Adrià Altimira remató a quemarropa, exigiendo una espectacular intervención de Wojciech Szczesny.

Barcelona respondió con algunas llegadas, pero sin la claridad necesaria. Lamine Yamal tuvo la más cercana con un disparo que rozó el lateral de la red, mientras que Alejandro Balde encendió las alarmas al salir lesionado antes del descanso. Esa baja momentáneamente desajustó al equipo, y Leganés aprovechó para cerrar la primera parte volcándose al ataque.

La segunda mitad arrancó con el infortunio de Sáenz, cuyo autogol le dio la ventaja a los azulgranas. A partir de ahí, el Barça manejó los tiempos del partido y neutralizó los intentos de un Leganés que nunca bajó los brazos. Con este resultado, el Barcelona se mantiene firme en la pelea por LaLiga, mientras que el Leganés se va con la frente en alto tras plantar cara a un aspirante al título.