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El Napoli derrotó 2-1 al AC Milán en un intenso partido de la jornada 30 de la Serie A, pero la atención de los seguidores se centró en un momento clave: el penalti fallado por Santiago Giménez, quien ingresó al minuto 55’ para cambiar el rumbo del encuentro. El delantero mexicano, tras haber sido recientemente campeón de la Concacaf Nations League con México, no logró convertir desde los once pasos, lo que complicó aún más las aspiraciones del Milán en este difícil encuentro.

El partido comenzó con un golpe temprano para el Milán. En los primeros segundos del juego, Matteo Politano aprovechó un centro preciso para abrir el marcador con un remate cruzado que venció al portero Mike Maignan. A pesar del esfuerzo por reaccionar, el Milán no logró encontrar la forma de penetrar la sólida defensa napolitana. Antes del descanso, el Napoli amplió su ventaja cuando Romelu Lukaku anotó de cabeza tras un córner, dejando al equipo rossonero en una situación complicada.

En el segundo tiempo, el técnico del Milán, Sérgio Conceição, decidió darle la oportunidad a Santiago Giménez, quien ingresó con la esperanza de aportar su olfato goleador. Sin embargo, el mexicano tuvo una oportunidad de oro para acercar a su equipo en el marcador al minuto 65, cuando el árbitro sancionó un penalti a favor del Milán por una falta en el área. Giménez, con la responsabilidad de descontar, cobró el penalti hacia el palo izquierdo del arquero Alex Meret.

El disparo de Giménez fue raso y con poca fuerza, lo que permitió a Meret adivinar la trayectoria y detener el penal sin dar rebote. El fallo fue un golpe para el delantero mexicano, que no pudo convertir en un momento crucial del partido, cuando el Milán necesitaba desesperadamente un gol para mantenerse en la pelea. Esta acción dejó una sensación agridulce para los seguidores del Milán y, en particular, para los aficionados mexicanos que esperaban que Santi marcara la diferencia.

A pesar de los esfuerzos por parte de Santiago Giménez, el Napoli supo administrar su ventaja en los minutos finales. El equipo local controló la posesión y frustró los intentos desesperados del Milán, que no logró encontrar la manera de igualar el marcador. La derrota deja al AC Milán en una situación complicada en la tabla, con sus aspiraciones de llegar a los puestos europeos cada vez más lejanas.

El Napoli, por su parte, sumó tres puntos vitales que lo mantienen en la lucha por el Scudetto. Aunque la victoria fue contundente, el momento del penalti fallado por Santiago Giménez dejó marcado el partido, especialmente para el delantero mexicano, quien vio cómo su oportunidad de brillar se escapaba entre sus manos.