A tan solo un día de cumplirse 43 años de su histórica actuación de aquel inolvidable juego 3 de la Serie Mundial de 1981 entre los Yankees de Nueva York y los Dodgers de Los Ángeles, batalla que apenas veremos de nuevo a partir de este viernes 25 de octubre con el Clásico de Otoño de 2024, ha fallecido Fernando “Toro” Valenzuela a sus 63 años por complicaciones de su hígado.

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El emblemático zurdo de oro nació en una localidad de Navojoa, Sonora un 1 de noviembre de 1960 llamada Etchohuaquila, sin imaginar que llegaría al escenario más importante del béisbol y a uno de los equipos más famosos del deporte mundial.

Su paso por Las Mayores fue tan significativo, que marcó tendencia con su “Fernandomanía”, el fenómeno que era verlo lanzar, lo que lo llevó a que su número 34 fuera inmortalizado por los Dodgers, ganándose la admiración y respeto de la fanaticada incluso anglosajona que hasta el día de hoy luce su jersey adornando las gradas del Dodger Stadium.

Fernandoooouuu! Dejó la “vara muy alta” para los peloteros aztecas en su sueño por llegar a la Gran Carpa, he incluso su hijo cargó con el estigma y no pudo despuntar su carrera como hubiera deseado por las constantes comparaciones y ni qué decir de otro zurdo, Julio César Urías en la historia reciente.

Valenzuela militó con diversas organizaciones que tuvieron el privilegio de tenerlo en sus filas además de los Dodgers, entre ellas se encuentran los Padres, Orioles, Angels y Phillies. En tanto que escribió su nombre en letras de oro gracias a su liderazgo en las Series Mundiales de 1981 y 1988.

En seis ocasiones fue parte del Juego de Estrellas de MLB, en su año debut fue acreedor de los reconocimientos de Novato del Año, Cy Young, Bat de Plata, lideró juegos completos ganados, entre otras estadísticas más.

En su paso por el béisbol mexicano, vio acción con los Mayos de Navojoa, Naranjeros de Hermosillo que en su honor llamaron su estadio con su nombre y con Águilas de Mexicali donde vivió el ocaso de su carrera.

Sus últimos años los desempeñó como comentarista en español para radio de sus adorados Dodgers.

¡Hasta siempre Toro!